La gota es un tipo de artritis que produce hinchazón, enrojecimiento, calor y rigidez en las articulaciones y que se forma por la acumulación de cristales microscópicos de ácido úrico en articulaciones y tejidos blandos.
Sucede cuando el cuerpo produce demasiado ácido úrico (consumo de alimentos con purinas: hígado, legumbres secas…) o no lo elimina adecuadamente. Al comienzo, las crisis de gota suelen mejorar en algunos días. Finalmente, se hacen más duraderas y ocurren con mayor frecuencia. La acumulación de ácido úrico puede conducir a cálculos renales. En caso de no tratarse, la gota puede resultar en daños permanentes en las articulaciones y los riñones.