La mielina es un material compuesto por proteínas y grasas que envuelve y protege las fibras nerviosas y facilita la conducción de los impulsos eléctricos. En la esclerosis múltiple, la mielina se inflama y se desprende. Después se destruye y forma una cicatriz (la palabra esclerosis significa cicatriz). La habilidad de los nervios para conducir impulsos eléctricos desde el cerebro y hacia el cerebro se interrumpe y esto produce los síntomas de la enfermedad.
Las manifestaciones pueden ser diversas:
- Debilidad, fatiga y temblor.
- Pérdida de control de brazos y piernas.
- Alteración de la sensibilización o dolor.
- Trastornos urinarios y visuales.