Los síntomas más habituales y comunes son:
- Hinchazón y dolor de las articulaciones, que mejora con movimientos y empeora con reposo. Las articulaciones, como las de las manos y las de los pies, las muñecas, los codos, los hombros, la cadera, las rodillas y los tobillos pueden tener problemas, aunque varían según el tipo de artritis.
- Rigidez articular matinal, de duración variable.
- Dificultad para mover las articulaciones afectadas.
- Deformación progresiva de las articulaciones y pérdida de la movilidad articular.
- Calor y enrojecimiento de la piel sobre las articulaciones afectadas. Se manifiesta únicamente en las artritis que aparecen de forma muy aguda (como por ejemplo la gota), y suelen estar ausentes en las artritis crónicas.