Ante los primeros síntomas de envenenamiento se deben extremar las atenciones hacia el afectado y dependen en gran medida del tipo de tóxico y la vía de entrada al organismo, así como de la sensibilidad de la víctima.
Estos son los síntomas de intoxicación o envenenamiento más frecuentes:
- Neurológicos: Dolor de cabeza, pérdida de conciencia, estupor, somnolencia, confusión, convulsiones, mareos.
- Respiratorios: Falta de aliento, tos, sensación de ahogo, dolor al inhalar.
- Digestivos: Vómitos, diarrea, falta de apetito, náuseas, mal aliento (olor extraño o inusual), quemaduras en labios y boca.
- Cutáneos: Erupciones en la piel, quemaduras, sensación de hormigueo en manos.
- Generales: Visión doble, fiebre, palpitaciones, labios azulados, irritabilidad, descontrol de los esfínteres, dolores generalizados.