La leucemia es el cáncer de la médula ósea que afecta la sangre. Afecta a los tres componentes de la sangre: los glóbulos blancos que combaten las infecciones, los glóbulos rojos que transportan el oxígeno y las plaquetas que detienen las hemorragias.
En la leucemia se producen grandes cantidades de unos glóbulos blancos llamados blastos, que viven más tiempo que las células sanas y las van desplazando. A medida que el tiempo, cada vez hay más blastos y menos células sanas con lo que la sangre no puede realizar su función.