El dolor es una sensación desencadenada por el sistema nervioso. El dolor puede ser agudo o crónico, intermitente o constante. Puede sentir dolor en algún lugar del cuerpo, como la espalda, el abdomen o el pecho o sentir dolor generalizado, como los dolores musculares durante una gripe.
El dolor agudo, generalmente es consecuencia de una enfermedad, inflamación, o lesión. La causa del dolor agudo generalmente puede diagnosticarse y tratarse, por estar limitado a una localización y un período de tiempo. En algunos casos, puede convertirse en crónico.
El dolor crónico se asocia con mayores tasas de depresión y ansiedad. También pueden producirse trastornos del sueño e insomnio debidos a la enfermedad que provoca el dolor e, incluso, a la medicación.